PASEANDO POR NEW YORK. 1- El ferry a Staten Island

Encontrar algo gratis en New York es muy difícil y que además valga la pena es complicado pero no imposible. Caminando por Battery Park, esquivando turistas, frenando antes de salir en las 2000 fotos que se sacan por minuto, evitando vendedores y atravesando la cola interminable para tomar el barco que va a la isla donde está la estatua de la Libertad se llega a la entrada del Staten Island Ferry desde el World Trade Center. Cada 15 minutos parte uno de estos barcos a la isla homónima a la que queda pegadita a Ushuaia. Staten Island (Isla de los estados) es uno de los 5 distritos municipales de New York City. Es el distrito menos poblados de la ciudad y el más desconocido (los otros cuatro son Manhatan, Queens, el Bronx y Brooklyn). El puente Verrazano-Narrows une esta isla con Long Island (Brooklyn) y otros dos puentes la unen al continente (New Jersey). Por suerte no existe conexión física con Manhatan y por este motivo todavía se conserva el servicio de Ferry.

Ahí llegó el ferry, se abren las puertas y la gente se divide en dos grupos, los que se atropellan hacia estribor (a la derecha) y otros que tranquilamente van a babor. Los dos grupos se diferencian en vestimenta y accesorios. Los que van a babor llevan trajes, carpetas, revistas, gorritos de los Yanquis y libros. En cambio, los que van a estribor tienen cámaras fotográficas, algún pantalón ridículo y sandalias abiertas con medias blancas. Esta diferencia se explica cuando el ferry zarpa. Por estribor se puede ver Miss Liberty y la Isla Ellis. A la vuelta, los mismos personajes que antes corrían a estribor ahora van a la proa para poder ver Gobernor´s Island, los edificios del Downtown, los ríos East y Hudson y los famosos puentes de Brooklyn y Manhatan.

Uno de estos ferrys naranjas aparece en la película Secretaria Ejecutiva o Armas de mujer (Títulos Argentinos y Españoles de Working Girl). En esta película, Tess McGill (Melanie Griffith) usa diariamente el ferry para ir a laburar con la chupa sangre de Katherine Parker (Sigourney Weaver). Gracias a que se filmó en 1988, Melanie pudo conseguir departamento en Staten Island y Carly Simon pudo ganar el oscar a la mejor canción con “Let the river run”. Hoy en día, a Melanie no le alcanzaría el sueldo para vivir más cerca que en Journal Square (Jersey City) y tomaría el poco agraciado Path train para ir al downtown. Por lo tanto la banda sonora tendría que ser de Soul Asylum (Runaway train) (1992) o de James Brown (night train) por ejemplo. La subida de precios de las propiedades en Staten Island se produjo por una mezcla de conciencia ecológica y cholulería. Hasta el año 2002, en Staten Island funcionaba el Fresh Kills Landfill, el vertedero de New York y el más grande del mundo. Hoy luego de un saneamiento espectacular (María Julia podrías tomar unas clases para decontaminar el Riachuelo) es un lugar muy deseado para vivir y hasta tiene su glamour. Si no sería inimaginable que la chetisima Carrie Bradshaw (Sarah Jessica Parker, Sexo en Nueva York) ponga sus divinos piecitos en una isla apestosa. Así y porque se rumorea que el guionista y el productor de la serie tienen unas fuertes inversiones en la isla, en un capítulo Sarita se pasea en el ferry, desembarca y al mejor estilo Colon “descubre” Staten Island. Se dice que al día siguiente de ese capítulo, las solicitudes de viviendas en la isla subieron 20 %!!! (Captaron la conexión con la cholulería?). Les dejo algunas fotitos de mi paseo. Esta bien, confieso que yo era uno de los que se atropellaban para ir a estribor (pero juro que no usaba sandalias).